Un medioambiente saludable es vital para garantizar una vida sana y promover el bienestar de la humanidad.

La salud resulta de un proceso que reúne factores de cuatro grandes componentes: biología, ambiente, estilos de vida y organización de la atención de la salud. Mientras que el ambiente refiere a aquellos factores relacionados con la salud que son externos del cuerpo humano. Ante la pandemia que estamos atravesando, un mundo cada vez más contaminado y la creciente repercusión de enfermedades, bajo el lema “Nuestro planeta, nuestra salud” la OMS (Organización Mundial de la Salud) junto con la OPS (Organización Panamericana de la Salud) y sus socios concentrarán la atención del mundo a la interconexión entre nuestro planeta y la salud. Esta convocatoria significa una oportunidad única para una recuperación verde y saludable de la pandemia de COVID-19, que pone la salud de las personas y el planeta en el medio de las acciones y fomenta el crecimiento de un movimiento para crear sociedades focalizadas en el bienestar.

La campaña que se lanzó el 7 de abril, día mundial de la salud, invita a las personas, las diferentes comunidades, gobiernos y organizaciones de todo el mundo a compartir sus historias sobre las medidas que están llevando adelante para proteger nuestro planeta y nuestra salud. El cambio climático es la mayor amenaza para la salud de la humanidad. Los profesionales sanitarios ya están respondiendo a los daños a la salud causados por esta crisis que atravesamos.

Algunos datos y cifras

• El cambio climático influye en los determinantes sociales y ambientales de la salud, por ejemplo, un aire limpio, agua potable, alimentos suficientes y una vivienda segura y digna.
• Se prevé que entre el 2030 y el 2050, el cambio climático causará unas 250.000 muertes adicionales cada año debido a la malnutrición, el paludismo, la diarrea y el estrés calórico.
• Se estima que el costo de los daños directos para la salud será de entre US$ 2000 y US$ 4000 millones al año de acá a 2030.
• Las zonas con malas infraestructuras sanitarias, en su mayoría países en desarrollo, serán las menos capacitadas para prepararse y responder frente a esos cambios si no reciben ayuda.

El Dr. Alberto Davidovich, director médico de Emerger detalla algunas de las acciones que se pueden llevar adelante para cuidar nuestro planeta y nuestra salud:
• Priorizar el bienestar humano a largo plazo y la estabilidad ecológica en todas las decisiones.
• Aplicar las directrices de la OMS sobre la calidad del aire.
• Utilizar energías renovables.
• Reducir los niveles de contaminación del aire para disminuir la carga de morbilidad derivada de los accidentes cerebrovasculares, las cardiopatías, el cáncer de pulmón y las enfermedades respiratorias tanto crónicas como agudas, incluida el asma.
• Consumir menos alimentos y bebidas altamente procesadas, con alto contenido en sal, azucares y grasas no saludables.
• Planificar espacios verdes que promuevan la actividad física y la salud mental.
• Promover ciudades libres de humo y gravar el tabaco.
• Diseñar políticas de reducción de residuos plásticos.
• Garantizar el acceso al agua potable.
• Incentivar el uso de la bicicleta y el transporte público.
• Consumir alimentos frescos a productores locales.

La lucha contra el calentamiento global se nos presenta como un desafío complejo que requiere de la unidad de todos los sectores, públicos y privados. Es sumamente necesario que se implementen todas las propuestas que contribuyan a mitigar los efectos adversos de la contaminación sobre el medioambiente y la salud.